El truco de la hoja de laurel en el radiador que cambiará el ambiente de tu hogar

El invierno está ya casi aquí y con él llega el frío y el momento de encender la calefacción. También de preocuparse por el ahorro y hacer pequeños gestos para que la factura de la luz no sea tan alta.

Para ello, hay muchos trucos, pero el hábito del ahorro se puede aplicar a muchos aspectos, como sacarle el máximo partido a tus radiadores para aprovechar el calor con otros beneficios.

Si tienes una hoja de laurel, puedes olvidarte del ambientador este invierno. Solo tienes que colocar unas hojas frescas encima del radiador. El calor hará que las hojas desprendan un agradable olor por toda la casa que impregnará tu hogar. Además, las hojas también se secarán y puedes reutilizarla en la cocina.

El laurel tiene un olor suave, y su aceite esencial suele usarse en difusores como ambientador, así que emplear directamente sus hojas tiene mucho sentido. Pero lo mejor es que tiene muchas propiedades que se aplican a la aromaterapia.  Una de ellas es que es antiinfeccioso, por lo que es ideal para protegerte de bacterias, virus, hongos y parásitos.

Igualmente, es antiinflamatorio y antiespasmódico, ayudando a aliviar el dolor en articulaciones y musculatura. Incluso se le aplican propiedades como tónico nervioso que ayuda a salir del letargo y la apatía, alejando el cansancio físico y nervioso, incluso favoreciendo la concentración, por lo que va genial para estudiar o trabajar.

Esta planta aromática contiene vitaminas A, C, B6, calcio, potasio, fósforo y magnesio. Ingerido, contiene propiedades astringentes y diuréticas y es un antioxidante para el cuerpo. 

No te limites a los radiadores, mucha gente lo pone debajo de la cama o hasta en la almohada, alfombras y en el baño; y es que la combinación de laurel y ambiente cálido siempre es ganadora.