¿Tiendes la ropa dentro de casa los días de lluvia? Estos son los errores que no debes cometer

Por mucho que haya gente que disfrute de la lluvia, o que incluso se relaje los días en los que llueve, existen algunas cuestiones prácticas, por así decirlo, que es imposible no sufrir en estas jornadas. Por ejemplo, cuando el clima te obliga a tender la ropa dentro de casa. Los tendederos de interior, de hecho, son cada día más habituales en muchos hogares.

No solo por un tema del tiempo que haga, sino en ocasiones también por pura comodidad o ahorro de espacio y de tiempo, más aún si se usa un modelo eléctrico. Lo que mucha gente no sabe es que en ocasiones puede que estés cometiendo errores al tender la ropa dentro de casa.

Cuidado al tender la ropa en casa

Es posible que si durante el invierno te has visto en la obligación de tender la ropa en casa te hayas encontrado con una desagradable sorpresa: que al recogerla, algunas prendas desprenden mal olor por culpa de la humedad. Esto puede deberse al hecho de que, en efecto, la ropa no se está secando al aire libre, pero no siempre es así. De hecho, casi siempre tiene truco.

Para empezar, da igual dónde se seque la ropa, siempre y cuando esta cuente con espacio para transpirar. Muchas veces es fácil caer en el error de, al usar un tendedero de interior, apiñar la ropa mucho más con la intención de aprovechar más al espacio. Recuerda siempre que las prendas requieren de separación para que circule el aire y no se acumulen malos olores.

El sitio en el que sitúes el propio tendedero es importante a la hora de conseguir que la ropa se seque mejor, e incluso antes. Si tienes la oportunidad de hacerlo en una habitación más grande, o que esté mejor ventilada, el resultado será mejor que si lo haces en un cuarto pequeño y abarrotado. 

Otro error frecuente pasa por retirar la ropa antes de tiempo. El secado tiene un proceso, y cuando es dentro de casa, suele tardar más en hacerlo. Es posible que tengas el tiempo cogido a cuando están en la cuerda o fuera, o que simplemente al ocupar sitio en un dormitorio o el salón, estés deseando quitarla de en medio. Pero las prisas no son buenas, y también puede generar humedad.

Tómate tu tiempo

Está claro que tender la ropa no es una de las tareas domésticas más apasionantes del mundo, precisamente. Pero hay veces que tomártelo con calma para hacer las cosas bien puede, al final, ahorrarte tiempo y esfuerzos. Si cometes el error de tender la ropa según la coges de la lavadora, sin ni siquiera estirarla bien, esta tardará más en secarse y estará más arrugada luego. 

Además, ya tiendas dentro o fuera de casa, solo utiliza una pinza por ropa, y siempre procurando que esta ocupa un lugar poco visible, como debajo de las axilas, y a poder ser con la prenda dada la vuelta. Así evitarás que estas se deformen y te durarán más tiempo.