El mercado chino de coches eléctricos podría enfrentarse pronto a un brutal ajuste de cuentas

Tom Carter
| Traducido por: 
China coches eléctricos

Business Insider

  • La industria china de vehículos eléctricos está en auge, pero podría estar a punto de enfrentarse a un doloroso ajuste de cuentas.
  • La guerra de precios y la ralentización de la demanda están presionando a los fabricantes chinos de vehículos eléctricos.

La industria china de los coches eléctricos ha florecido en los últimos años, pero podría enfrentarse muy pronto un doloroso ajuste de cuentas. 

La Agencia Internacional de Energía (AIE) escribió en un informe reciente que, a pesar de que se espera que la adopción de vehículos eléctricos en China crezca al 45% este año, todavía hay "muchas más empresas de coches eléctricos en China de las que posiblemente puedan sobrevivir en un mercado competitivo".

"Solo en 2014, hace diez años, más de 80.000 empresas registradas en China ingresaron al sector de la electromovilidad. En 2023, más del 80% de las ventas de autos eléctricos en China se concentraron en poco más de 30 empresas", decía el informe.

El mercado chino de los coches eléctricos es conocido por ser brutalmente competitivo, con alrededor de 123 empresas compitiendo por los clientes. Ejecutivos y expertos del sector advierten que el número de participantes probablemente disminuirá en los próximos años, ya que los vientos económicos en contra están aumentando la presión sobre los fabricantes de vehículos eléctricos.

El informe de la AIE concluye que el mercado chino de coches eléctricos probablemente se consolidará en torno a un puñado de "campeones robustos". 

Algunos CEO del sector ya se han referido a esa circunstancia e incluso han reconocido estar preparándose para lo que el jefe del fabricante Xpeng, He Xiaopeng, ha descrito como una "ronda eliminatoria" que podría terminar en una "carnicería" a la vista de que los precios siguen bajando incluso a pesar de que el crecimiento del sector se está desacelerando. 

"No es correcto que una startup persiga el idealismo", pronunció en diciembre William Li, CEO de Nio, otra rival china de Tesla, en una rueda de prensa en diciembre según recoge el South China Morning Post. "Nio, como empresa de coches eléctricos, tiene que enfrentarse a la cruda realidad e intentar sortear el bache a medida que se intensifica la competencia en el mercado", añadió.

El jefe de Xpeng, He Xiaopeng, afirmó que 2024 será una "ronda eliminatoria" para las empresas chinas de vehículos eléctricos.
El jefe de Xpeng, He Xiaopeng, afirmó que 2024 será una "ronda eliminatoria" para las empresas chinas de vehículos eléctricos.

getty

Concentración inminente

Este pesimismo se basa en las perspectivas de que el rápido ritmo de adopción de coches eléctricos en China se ralentizará este año, ya que la economía china se enfrenta a una deflación galopante y a una grave crisis inmobiliaria.

Según la Asociación China de Turismos, se espera que las ventas de vehículos propulsados por energías renovables aumenten un 25% en 2024, frente al 36% del año anterior. 

Dos de los mayores fabricantes de automóviles de China, BYD y Li Auto, informaron recientemente resultados desiguales en el primer trimestre. BYD vendió 300.000 eléctricos puros (de batería) en los primeros tres meses del año, una caída significativa respecto al récord de 526.000 del trimestre anterior.

Li Auto, por su parte, no alcanzó los objetivos de los analistas en cuanto a ventas de vehículos e ingresos netos, y recortó los objetivos de entrega de su nueva camioneta eléctrica pura, que no se vendió tan bien como se esperaba.

La ralentización de la demanda ha desencadenado una brutal guerra de precios iniciada por Tesla, de Elon Musk. El fabricante de automóviles comenzó a reducir los precios de algunos de sus modelos en China en 2022 y ha continuado bajándolos desde entonces, obligando a los rivales locales a responder y bajar sus propios precios para mantenerse competitivos.

También ha provocado temores de exceso de producción, ya que las cuantiosas subvenciones a la industria de los vehículos eléctricos han dado lugar a un exceso de nuevas fábricas construidas en los últimos años.

La Oficina Nacional de Estadística de China calcula que la utilización de la capacidad de la industria automovilística se situó en el 65% en los tres primeros meses de este año, frente al 75% de 2023 y el 80% anterior a la pandemia de la pandemia de covid-19, según The New York Times

Esto ha aumentado la presión financiera sobre los fabricantes chinos de vehículos eléctricos, muchos de los cuales han acumulado pérdidas a medida que han ido escalando sus negocios.

El jefe de Nio, William Li, en el Salón del Automóvil de Pekín.
El jefe de Nio, William Li, en el Salón del Automóvil de Pekín.

getty images

Nio, por ejemplo, nunca ha obtenido beneficios e informó una pérdida de 2.900 millones de dólares el año pasado. Su rival Xpeng registró una pérdida neta menor a la esperada de 1.410 millones de yuanes (195 millones de dólares) en los primeros tres meses de 2024, entregando 21.821 vehículos.

Los reguladores han lanzado sus propias advertencias. Xin Guobin, viceministro de Industria y Tecnología de la información, advirtió contra la expansión ante la "insuficiente" demanda de coches eléctricos por parte de los consumidores y dijo que Pekín tomaría "medidas contundentes" para hacer frente a la fabricación "a ciegas" de nuevos proyectos de coches eléctricos. 

"Hay muchas empresas de vehículos eléctricos en China. El volumen promedio por marca es muy bajo e insostenible y, por lo tanto, se acabará produciendo una consolidación", resume Stephen Dyer, jefe de consultoría de automoción e industria de Asia en Alixpartners, a Business Insider.

Según Dyer, la consolidación probablemente será un proceso prolongado, ya que los inversores y los gobiernos locales son reacios a dejar morir a las empresas de vehículos eléctricos. Pero añade que solo "un puñado" de empresas chinas probablemente estén obteniendo beneficios con su negocio de eléctricos, lo que significa que la crisis es inevitable.

"Entre las poco más de 120 marcas de vehículos eléctricos que están vendiendo coches eléctricos en China, creemos que alrededor de 20 a 30 probablemente serán viables financieramente a largo plazo", sentencia.

Lo que necesitas saber para estar informado

Lo que necesitas saber para estar informado

¿Te gusta lo que lees? Comienza tu día sabiendo qué piensan y qué les preocupa a los ejecutivos de las principales empresas del mundo con una selección de historias enviada por Business Insider España a primera hora cada mañana.

Recibe la newsletter

El océano rojo

Hay señales de que este adelgazamiento del rebaño ya ha comenzado.

El pasado mes de octubre, WM Motor, con sede en Shanghái, se declaró en preconcurso de acreedores. En febrero, la empresa responsable de la marca de vehículos eléctricos HiPhi suspendió su producción durante al menos seis meses.

Aiways, respaldada por Tencent, por su parte, supuestamente está trasladando sus operaciones de China a Alemania, según fuentes familiarizadas con esa operación, que han asegurado a Autocar que el movimiento se debe a la intensa competencia y a la presión de precios en su país de origen.

Un vehículo eléctrico Aiways expuesto en la eCarExpo de Suecia.
Un vehículo eléctrico Aiways expuesto en la eCarExpo de Suecia.

getty images

Los proveedores de piezas de coches eléctricos también están sintiendo la presión dado que los fabricantes de vehículos eléctricos están tardando cada vez más tiempo en pagar sus facturas.

Bloomberg informó este mes que tanto Nio como Xpeng están tardando más en liquidar sus facturas, algo que Lin Zhu, consultor de Alvarez & Marsal, ha asegurado que está llevando a los proveedores más pequeños al borde del abismo.

"Hemos visto que más fabricantes de componentes de automóviles se acercan a nosotros para mejorar su rentabilidad y algunos de ellos están pensando en deshacerse de negocios no rentable", explica Zhu a Bloomberg. "Los más débiles en la cadena de suministro corren un alto riesgo de ser expulsados del mercado", subraya.

El problema es aún mayor para los fabricantes de automóviles extranjeros, que han visto cómo su posición en China disminuía gradualmente en favor de los fabricantes locales.

"En estos momentos es una cuestión de supervivencia. Cada vez es más difícil para los fabricantes europeos en China", resumió Linda Jackson, CEO de la marca francesa Peugeot, en el Future of the Car Summit del Financial Times. Peugeot no ha respondido a la petición de BI sobre si actualmente vende vehículos eléctricos en China.

"Para estar allí, tienes que entrar en lo que yo llamaría el océano rojo (de pérdidas), o te retiras, reduces tu volumen y esperas a ver hacia dónde va el mercado", dijo. "Habrá consolidación, incluso en el mercado chino (...) una gran mayoría de las startups chinas de vehículos eléctricos no están ganando dinero", añadió Jackson.

Lucha por sobrevivir

Un BYD Seagull EV. El rival de Tesla registró una caída de las ventas en sus resultados del primer trimestre.
Un BYD Seagull EV. El rival de Tesla registró una caída de las ventas en sus resultados del primer trimestre.

getty images

Paul Li, CEO de la empresa china de tecnología de VE U-Power, explica a BI que las empresas chinas de coches eléctricos necesitan cambiar sus modelos de negocio para ser rentables y evitar la extinción.

Esto significa desarrollar vehículos con una "metodología de eléctricos", subraya, priorizando vehículos inteligentes y nuevas características en lugar de simplemente convertir vehículos de motor de combustión en modelos eléctricos.

También señala que es necesario encontrar nuevas formas de obtener beneficios de los vehículos después de la compra inicial, ya que los coches eléctricos requieren menos mantenimiento y menos sustituciones de piezas que los vehículos de gasolina.

"Los fabricantes de automóviles deben encontrar muchas nuevas formas de obtener beneficios, además de vender el coche", resume Li. "Las baterías pueden convertirse en un servicio, la carga puede convertirse en un servicio, las finanzas, los seguros y la conducción autónoma pueden convertirse en un servicio", explica.

En última instancia, el mayor desafío que enfrentan los fabricantes chinos de coches eléctricos es diferenciarse de las más de cien otras empresas que luchan por los mismos clientes, y hasta que lo hagan, la guerra de precios probablemente continuará, pronostica Stephen Dyer de AlixPartners a BI.

"La mayoría de las empresas no están claramente diferenciadas. Y si tu producto no está diferenciado, terminará en una guerra de precios", sentencia.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.