Así gané más de 300.000 euros con Airbnb en un solo verano entre Ibiza y Mallorca

Quiere ser libre, pero ganar mucho dinero. Enrico Persano tiene estas ambiciones desde su juventud. Dejó la formación profesional al poco tiempo: le faltaba libertad, asegura. Su carrera de DJ en Berlín fracasó porque no tenía suficiente dinero. Y justo cuando pudo compaginar ambos factores con los bienes inmuebles, la pandemia hizo tropezar al joven de 30 años.

Pero Enrico Persano no ha dejado que esto le desanime. Ha descubierto una vía de negocio con la que ganó casi 320.000 euros en apenas unos meses el año pasado (Business Insider ha podido comprobar dichos ingresos). Para ser exactos, este padre de familia puso en marcha su propio negocio con el modelo de arbitraje de Airbnb.

Se trata de una estrategia empresarial en la que un inversor alquila una propiedad a largo plazo y la realquila en plataformas de alquiler a corto plazo como Airbnb a precios más altos. Por lo general, el empresario busca propiedades de alquiler en ubicaciones atractivas que tengan una gran demanda de alquileres a corto plazo y su principal ventaja son los menores costes iniciales, ya que no es necesario comprar la propiedad. Sin embargo, también existen riesgos, como las restricciones legales y las fluctuaciones del mercado, que requieren una planificación cuidadosa y una gestión eficaz.

Hoy en día, el joven alquila propiedades de lujo en Mallorca e Ibiza. En una entrevista con Business Insider, este joven de 30 años no solo revela cómo lo ha conseguido. También da consejos específicos para ayudarte a tener el mismo éxito con el arbitraje de Airbnb.

Enrico Persano es originario de Stuttgart, donde creció en el seno de una familia de hosteleros. Sus padres eran propietarios de hoteles y restaurantes. Por ello, empezó a formarse como especialista del sector de la restauración, pero abandonó los estudios muy pronto y empezó a trabajar muy joven para ganar dinero. "Vivía al día para llegar a fin de mes", cuenta.

Tras varios trabajos esporádicos, trabajó como ayudante de integración durante unos tres años. En una escuela Waldorf, se ocupaba de la integración de niños con discapacidad mental. "Eso me aportó mucho, pero en algún momento necesité un cambio", afirma el joven.

Su objetivo era ganarse la vida algún día como autónomo. "Pero no estaba seguro de lo que quería hacer exactamente", comenta. Ni siquiera le salió muy bien trabajar como DJ, admite. Sin embargo, fue en conciertos en Berlín donde entró en contacto por primera vez con Airbnb y el arbitraje. "Unos amigos a los que les gustaba salir de fiesta todo el fin de semana me dijeron que alquilaban su piso durante ese tiempo", recuerda Enrico Persano sobre el momento exacto que despertó su curiosidad.

No tenía medios económicos para comprar un piso para alquilar. Por eso decidió subarrendar su piso de alquiler durante diez semanas, "con el permiso del propietario, por supuesto", subraya.

Esto es lo que ganaba con su propio piso

Enrico Persano se alojaba con amigos, se encargaba de registrar a los huéspedes y de limpiar el piso. "Al cabo de unas semanas, pude ofrecer un segundo piso", afirma. Debido a la ley de apropiación indebida, alquiló propiedades fuera de Stuttgart y rápidamente pudo adquirir cuatro pisos para su cartera.

Los calendarios de reservas de los pisos se llenaron rápidamente, sin ni siquiera tener que hacer fotos profesionales. "Por 125 euros la noche, obtuve unos ingresos de entre 3.500 y 4.000 euros por piso en un mes, con un alquiler de apenas 670 euros", afirma. Ganaba algo menos de 10.000 euros al mes antes de impuestos.

En 2019 se mudó a Ibiza, pero poco después llegó la pandemia de coronavirus. "Eso significó tener que renunciar a todos mis pisos en los alrededores de Stuttgart". Sin embargo, el joven estaba lejos de abandonar su objetivo y, sobre todo, su convicción del potencial del arbitraje de Airbnb. "Entonces pensé en cómo podría implementar esto en España". Para ello necesitaba inmuebles con licencia turística. Sin ella, alquilar a turistas es ilegal.

También son imprescindibles un seguro de responsabilidad civil y un número de identificación fiscal. Debe estipularse contractualmente que la propiedad se va a utilizar para alquileres de corta duración. "Y luego hay que darse de alta en el Consell de Turismo como gestor", explica y añade que los pasos legales son más claros que en Alemania. La ventaja de España, afirma, es que los propietarios suelen estar ya convencidos del concepto de arbitraje.

El arbitraje de Airbnb le generó 320.000 euros en verano

Enrico Persano vive ahora en Mallorca y está especializado en alquilar villas de vacaciones en España. Las alquila a largo o corto plazo utilizando el modelo de arbitraje y las subalquila. Esta temporada, el joven tiene tres villas en cartera: dos en Ibiza y una en Mallorca. El año pasado tenía cuatro, con las que ganó 319.000 euros durante el periodo vacacional. La elección del inmueble siempre es crucial.

"En lugares como Ibiza, los pisos no son relevantes. Interesan sobre todo casas con piscina y al menos cuatro dormitorios", explica. La ubicación no juega ningún papel en la pequeña isla balear. En Mallorca, sin embargo, la ubicación en la playa es importante. 

Alquiló la primera villa con el dinero que había ganado anteriormente con pisos en los alrededores de su ciudad natal. El alquiler del chalet fue perfecto "desde el primer momento". Solo con este chalet obtuvo unos beneficios de 70.000 euros en su primera temporada. "Salió mucho mejor de lo esperado".

Ahora, sus amigos que trabajan como agentes inmobiliarios le sugieren chalés idóneos. "Pero también busco en plataformas inmobiliarias locales propiedades con licencia turística", comenta. Plataformas como Idealista, Milanuncios e incluso Facebook son especialmente útiles para los recién llegados, según Persano.

"Si las propiedades van bien, se puede ganar bastante dinero a largo plazo", afirma este nativo de Stuttgart, que también trabaja en consultoría y planea crear un fondo inmobiliario cerrado para alquileres a corto plazo. Según indica, el alquiler de las dos villas en Ibiza cuesta 3.500 y 4.500 euros al mes. "Con una sola propiedad, puedo ganar entre 60.000 y 70.000 euros por temporada". Los precios y los beneficios varían en función de la propiedad.

Este es el capital inicial que necesitas para emprender con Airbnb

Enrico Persano aconseja iniciar el negocio con al menos 10.000 euros de capital propio. "Ese dinero sirve para el primer alquiler, la fianza, el inventario, la decoración, la ropa de cama y las toallas", añade.

El joven también menciona esta suma a sus clientes, a los que asesora para que se inicien en el modelo de arbitraje de Airbnb.

También les aconseja repetidamente que los pequeños pasos no están de más, sobre todo al principio. "Es importante tener los pies en la tierra y no ser demasiado arrogante", subraya. Eso no significa que haya que empezar con propiedades pequeñas. "Los pisos de tres dormitorios son ideales, ya que de lo contrario compites con hoteles y muchos otros proveedores".

Una vez encontrada una propiedad adecuada, cualquiera puede convertirse en un buen inversor inmobiliario de arbitraje. "Básicamente, cualquiera puede hacerlo si tiene algo de dinero y ganas", afirma.

Sin embargo, es aconsejable tener ciertas nociones de gestión de huéspedes.

"Crecí en el sector de la hostelería y lo llevo en la sangre. Hay que optimizar todo para que sea lo más profesional posible", subraya el joven. Con esto se refiere a fotos profesionales, limpieza y una descripción completa. Por otro lado, también se trata de pequeños detalles en el equipamiento. "Hay que darse cuenta de lo que realmente valoran los huéspedes. El aceite de oliva, las especias y un secador de pelo, por ejemplo, son esenciales", explica.

¿Es arriesgado quedarse en un alojamiento de Airbnb sin reseñas?

Cualquier cosa por debajo de cinco estrellas en Airbnb es mala. "Tienes que alquilar la propiedad tan a la perfección que nadie pueda encontrar nada de lo que quejarse", afirma tajante. Tener cinco estrellas es realmente imprescindible en la plataforma.

Por eso le basta con su pequeña cartera

Quizá también por eso le baste con alquilar solo tres chalés esta temporada. "Tengo que ser honesto, estoy bastante contento con lo que tengo", asegura. Por eso no quiere aumentar su cartera de momento. Tiene una familia, una gran finca con un gran jardín y mucho trabajo. "Los ingresos ya son bastante buenos, por supuesto. Pero estoy totalmente bien con cómo están las cosas ahora y no hay que confiarse".