BBVA admite que la opa a Sabadell podría no salir adelante o implicar un coste económico superior al previsto

BBVA acaba de avisar a los inversores sobre los posibles impactos negativos y factores de riesgo de la opa hostil sobre Sabadell, un par de semanas después de que el 96% de los accionistas de la entidad vasca respaldasen en la junta la ampliación de capital necesaria para acometer la operación.

Según se hace eco El Economista, el banco presidido por Carlos Torres ha reconocido que la opa podría conllevar costes económicos y en capital superiores a los estimados que limiten la rentabilidad prevista, o que directamente la transacción podría no llegar a buen puerto.

Estos potenciales riesgos para los inversores aparecen recogidos en el folleto de una emisión de bonos contingentes convertibles (Cocos) por valor de 750 millones de euros que presentó en la CNMV en junio. 

Aunque sean remotos o inmateriales, los factores de riesgo tienen como propósito advertir a los accionistas e inversores de los potenciales escenarios negativos, un procedimiento habitual en las adquisiciones o fusiones.

Según recoge Expansión, el informe señala que "es posible que el grupo no complete la oferta o cualquier otra transacción en curso de manera oportuna o rentable". El escrito constituye la primera ocasión en la que BBVA alerta por escrito del peligro. Otras fuentes oficiales detallan a dicho medio que el banco también ha alertado en el programa de renta fija publicado el pasado 11 de julio.

La integración podría mermar las cuentas o exponer el banco a litigios

El documento recoge que "los resultados del grupo podrían verse afectados negativamente por cargos y contingencias relacionados con la adquisición". También alerta de posibles litigios, como "reclamaciones de empleados despedidos, clientes o terceros", o "problemas asociados con eventos imprevistos, o relacionados con los activos o negocios adquiridos que pueden no haber sido revelados".

El folleto señala que BBVA no "puede garantizar que los negocios que adquiere el grupo puedan ser integrados con éxito o que funcionarán bien una vez integrados", y que las "adquisiciones son inherentemente riesgosas debido a las dificultades que pueden surgir en la integración de personas, operaciones y tecnologías".

Por ello, la entidad podría "incurrir en importantes gastos inesperados, desviar recursos significativos y la atención de la gerencia de otras preocupaciones comerciales" si llega a integrar a Banco Sabadell, cuya absorción podría ahorrar, según sus cálculos, unos 850 millones de euros. 

El impacto de la opa sería de 30 puntos básicos en la ratio de capital si el 100% de los accionistas de Sabadell la aceptasen, y ascendería a 44 puntos si lo suscribe el 50,01% del capital. Por el momento, la CNMC continúa analizando la información. Cabe recordar que, de producirse, el canje sería de un título propio de BBVA por cada 4,83 de Sabadell.

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