Trabajé en Google durante casi una década: su problema es la burocracia, no el trabajo híbrido

Jordan Thibodeau trabajó en Google durante casi una década antes de marcharse en 2020.
Jordan Thibodeau trabajó en Google durante casi una década antes de marcharse en 2020.

Jordan Thibodeau

Tom Carter,

| Traducido por: 
  • Eric Schmidt, ex-CEO de Google, dijo recientemente que Google se estaba quedando atrás debido al teletrabajo, pero más tarde se retractó de sus comentarios.
  • Jordan Thibodeau, que trabajó en Google durante casi una década, cree que las declaraciones de Schmidt están fuera de lugar.
  • El que fuera director de recursos humanos, que dejó Google en 2020, afirma que la culpa de los problemas de Google es de la burocracia.

Este artículo se basa en una conversación con Jordan Thibodeau, un antiguo empleado de Google y Slack que copresenta el podcast SVIC.

Trabajé en Google durante diez años y fue la mayor oportunidad de mi vida.

Obtuve un puesto en Google como contratista temporal en 2011, antes de pasar a uno a tiempo completo en 2012. Después empecé a trabajar en recursos humanos, concretamente en fusiones y adquisiciones, y lo hice hasta que lo dejé en 2020.

Me siento muy orgulloso de mi paso por Google y la empresa siempre ocupará un lugar especial en mi corazón. Google me ayudó a estabilizarme económicamente y es una gran empresa con personas maravillosas.

Cuando el ex consejero delegado de Google, Eric Schmidt, hizo sus comentarios sobre el retraso tecnológico debido al teletrabajo, pensé que estaban completamente fuera de lugar.

Con el debido respeto a Schmidt, los datos no respaldan su interpretación de lo que ocurre en Google.

Google fue pionera en la tecnología en la que se basa ChatGPT. En 2017, sus investigadores escribieron el artículo que expuso la tecnología que hay detrás de los grandes modelos lingüísticos.

Burocracia

No se trata de un problema relacionado con el trabajo desde casa. Google tenía la tecnología, pero decidió no aprovecharla.

El verdadero problema de Google es que hay demasiada burocracia. Cuando empecé, Google tenía unos 30.000 empleados. Seguía siendo una gran empresa, pero la gente seguía haciendo cosas.

Cuando me fui a Slack, había unos 135.000 empleados. Sentí que, incluso en recursos humanos, habíamos pasado de ser una empresa tecnológica de rápido crecimiento a un departamento gubernamental de rápido crecimiento.

Había una opresiva carga burocrática. Muchos de mis amigos, directivos que siguen en Google, dicen que han perdido la capacidad de ser verdaderos jefes de producto porque hay mucha burocracia.

Pensamiento de grupo

Ejecutivos como Schmidt utilizan el trabajo desde casa como chivo expiatorio. Fíjate en Nvidia: Jensen Huang dice que le parece bien que los empleados trabajen desde casa todo lo que quieran, siempre que produzcan. Y están produciendo: Nvidia es ahora una de las empresas más valiosas de Silicon Valley.

Lo que me molesta de los comentarios de Schmidt, incluso después de que dijera que se había expresado mal, es que aquí, en Silicon Valley, tenemos pensamiento de grupo. Así que, cuando un ejecutivo muy respetado dice cosas como esta, otros ejecutivos le escuchan y le hacen caso.

Es como cuando Elon Musk se deshizo del 80% de la plantilla de Twitter. Creo que eso hizo que muchos otros ejecutivos dijeran: "Hey, podemos deshacernos de un montón de gente también".

Cuando Eric Schmidt hace esos comentarios, está perjudicando a mucha gente que no tiene voz dentro de Google, que se ha visto obligada a trasladarse o que se está planteando dejar la empresa por la presión de volver a la oficina. En 2022, se comunicó a los empleados de Google que debían estar en la oficina al menos tres días a la semana. La empresa también ofrece la opción de "semanas de trabajo desde cualquier lugar".

Problemas con las políticas de retorno a la oficina

Cuando Larry Page era consejero delegado de Google, existía una política de intentar que los empleados se trasladaran a las sedes centrales. Con Sundar Pichai, la decisión se dejó en manos de los vicepresidentes, que con el tiempo empezaron a relajarse y a decir a los empleados que podían trabajar en oficinas satélite y ser flexibles.

Cuando llegó el covid, se obligó a todo el mundo a trabajar desde casa. Conocí a muchos empleados de Google que se fueron a vivir a zonas más baratas y se dio por sentado que seguirían trabajando desde casa.

Muchos empleados estaban muy enfadados porque pensaban que, durante el covid, si un jefe estaba de acuerdo con su trabajo, podían trasladarse. Les pareció una traición a su confianza.

El regreso a la oficina llenó a todos de un miedo y una ansiedad tremendos. He tenido amigos que corrían el riesgo de perder su trabajo desde casa y han tenido que ir a terapia.

Cuando finalmente me fui para unirme al equipo de recursos humanos de M&A de Slack, me ofrecieron un trabajo a tiempo completo desde casa, lo que fue genial porque podía cuidar de mi padre. Ahorrarme 10 horas a la semana en desplazamientos para poder estar más tiempo en casa fue una gran oportunidad.

Muchos de los antiguos y actuales googlers con los que he hablado piensan que los comentarios de Schmidt fueron insensibles e improductivos, y están nerviosos porque creen que los directivos podrían tomárselos en serio.

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Etiquetas: Teletrabajo, Trabajo, Google