Las tiendas de juguetes se mueren y los grandes fondos de inversión y una infancia cada vez más breve tienen mucho que ver
- Juguettos se ha hecho, en cuestión de semanas, con las empresas Imaginarium y Poly juguetes, ambas con problemas financieros, lo que evidencia un nuevo y complejo panorama comercial.
- El sector cerró 2023 con una caída de su facturación del 4% a pesar del impulso de la campaña navideña.-
La juguetera Imaginarium anunció su cierre definitivo en España el pasado mes de abril a causa de dificultades financieras. Unos meses después, y cuando parecía el fin de una era, Juguettos se hacía con la marca y anunciaba su vuelta al mercado en 2025.
Mediante una subasta pública, la compañía alicantina anunciaba la compra de todos los activos comerciales de Imaginarium por 240.000 euros. En la pugna por la firma, la española se había impuesto en el proceso de adquisición a ofertas como la de Toys R Us.
Pero ahí no acaban los movimientos en el sector. El último se produjo hace unas semanas con los mismos protagonistas: Juguettos se hacía con la juguetera Poly por 221.000 euros y se impone así a Toys R Us y Juguetilandia en la subasta.
De esta forma, Poly e Imaginarium se integrarán en otra emblemática juguetera. A punto de cumplir 50 años de historia, Juguettos es hoy en día una de las principales cadenas jugueteras en España, representando el 14% del mercado. Con estas dos adquisiciones, la compañía, con una facturación en 2023 de 141 millones, se hace más fuerte en el sector del juguete en el país.
"Los fondos de inversión no entienden de nostalgia"
Pero todos estos movimientos, en especial, la desaparición de un nutrido número de empresas del sector, dibujan un escenario diferente y complejo como pocos.
2023 ha sido otro año para olvidar, y van ya unos cuantos. El sector juguetero en España ha cerrado con una caída cercana al 3,8%, hasta lograr una facturación de 1.634 millones de euros, de acuerdo a la consultora Circana en base a los datos de Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ)
El impacto es mayor si se analiza detenidamente el dato: el 78% de las pérdidas del sector se produjeron durante la Campaña de Navidad, donde las ventas representan casi un 60% del total, con una facturación por debajo de la Campaña de Navidad del 2019 y con un nivel muy similar a la de 2020.
Son varios los motivos que explican esta caída de la industria. La consultora apunta a la reducción drástica de la edad de juguetes para abrazar, cada vez antes, la tecnología: "Los niños y niñas cada vez dejan de serlo a edades más tempranas, algo en lo que tiene mucho que ver la exposición a las pantallas en general y a los teléfonos móviles en particular".
También afloran los motivos puramente del mercado. Javi Padilla, escritor y emprendedor lanzaba un en la red social X sobre la coyuntura actual de la industria juguetera y sus posibles motivos.
En concreto, Padilla ponía de manifiesto que las tiendas de juguetes llevaban 10 años en caída libre. Apuntaba, entre otros motivos, al predominio de Amazon en online –en Alemania, el 65-70% de las ventas de juguete por Internet– pero también al fin de una era, en la que padres e hijos visitaban las tiendas: "Ahora los niños ven lo que quieren en YouTube".
No es menor tampoco el papel de los fondos de inversión: "No entienden de nostalgia". Recuerda el empresario como Toys R' Us cerró sus tiendas físicas porque los inversores no estaban dispuestos a seguir en un negocio con bajos márgenes o pérdidas.
"Hay una inercia muy peligrosa en el sector y cierta sensación de brazos caídos en algunas jugueteras grandes –también en manos de fondos de inversión–", se lamenta en tuit que acumula más de medio millón de visualizaciones.
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