La IA podría potenciar (aún más) la subcontratación
iStock; Rebecca Zisser/BI
- La IA podría aumentar el atractivo de la subcontratación empresarial haciendo más fuertes a los trabajadores extranjeros.
- La tecnología puede aumentar la eficiencia de los trabajadores extranjeros y hacerlos capaces de desempeñar funciones más cualificadas.
- Andrew Yeung pronostica que veremos "un ejército de talento deslocalizado equipado con herramientas de IA".
Uno de los tópicos sobre la inteligencia artificial es que la IA no te quitará el trabajo, sino que lo hará alguien que sepa utilizarla.
Sin embargo, existe otra posibilidad: alguien que sepa cómo utilizar la IA —y que viva en otro país— vendrá a robarte tu trabajo.
La deslocalización impulsada por la IA podría suponer una amenaza para los trabajadores de las economías más potentes, al hacer que los trabajadores de los mercados más baratos sean más eficientes y estén más capacitados para asumir puestos de trabajo más cualificados.
El doble impacto de los superpoderes de la IA y la mano de obra barata podría significar que los tipos de funciones que corren el riesgo de ser deslocalizadas pasen de ser tareas repetitivas como la introducción de datos, que tradicionalmente se han considerado acciones que la IA puede sustituir, a trabajos más sustanciosos como la ingeniería, la atención al cliente de alto nivel y el marketing, como explican varios expertos del sector a Business Insider.
Andrew Yeung, antiguo jefe de producto de Google y Meta, pronosticó en mayo que los trabajadores extranjeros que se formen en IA ocuparán algún día numerosos puestos de trabajo.
"Dentro de unos años, todos los fundadores y ejecutivos de alto nivel contarán con un ejército de talentos extranjeros equipados con herramientas de IA que sustituirán por completo a los ingenieros, diseñadores, vendedores y asistentes tradicionales", escribió en X.
Su tesis parece respaldada por Sagar Khatri, cofundador y CEO de Multiplier. La plataforma de esta empresa permite a los empresarios contratar trabajadores desde cualquier lugar automatizando funciones como las nóminas y el cumplimiento de la legislación laboral. Khatri explica a BI que las empresas se enfrentarán a una mayor presión para internacionalizarse, no para aumentar las ventas, sino para encontrar a los trabajadores cualificados que necesitan.
Con el aumento de la productividad gracias a la IA, una empresa de Nueva York podría contratar más fácilmente contables en Filipinas, trabajadores de atención al cliente en México y equipos de atención al cliente en la India, explica Khatri.
"Con la IA, un agente de atención al cliente puede hacer su trabajo mucho mejor", afirma.
Todo el mundo de vuelta a la escuela
El aprendizaje online está facilitando que los trabajadores en el extranjero, especialmente los jóvenes de los países en desarrollo, adquieran competencias, dice Jeff Maggioncalda, CEO de Coursera.
También asegura a BI que los trabajadores se enfrentarán cada vez más a la competencia de otros en el extranjero que están utilizando la tecnología para automatizar y ser más eficientes.
Y no se trata solo de aprender sobre IA, sino de aprender de la IA. Maggioncalda cree que la tecnología puede ayudar a los trabajadores de las zonas emergentes a ponerse al día más rápidamente y competir con los que cobran salarios más altos en las economías desarrolladas. Para muchos trabajadores, un factor importante será lo que él llama "agilidad del talento". Esencialmente, se trata de la rapidez con la que los trabajadores pueden aprender cosas nuevas para añadir valor a los modelos de negocio.
"Suena un poco burdo, pero es a lo que se va a llegar", defiende Maggioncalda.
Añade que un trabajador de una región de bajo coste que antes tardaba cinco años en ser tan eficaz como alguien de un mercado laboral más caro, ahora puede serlo mucho antes. Esa persona en el extranjero ni siquiera tiene que ser necesariamente mejor, afirma Maggioncalda.
La amenaza viene simplemente de "alguien que te iguala pero cuesta menos", resume.
Maggioncalda explica que es más fácil contratar, despedir y trasladar trabajadores en muchos mercados en desarrollo. Muchos trabajadores de estos mercados, dice, son jóvenes y tienen hambre de adquirir habilidades que les ayuden a construir sus carreras. La IA completa la ecuación.
"Ahora tienen una herramienta que tiene un impacto diferencialmente positivo en su productividad en comparación con alguien que está en el extremo superior", explica. "La única pregunta es: ¿a qué velocidad va a ocurrir esto?".
Basándonos en los números de Coursera, podría ser pronto. En 2023, la empresa matriculó a una persona cada minuto en una clase de IA generativa. En 2024, está atrayendo a cuatro personas cada minuto, cuenta.
El 52% de los inscritos en las clases de IA generativa de Coursera proceden de mercados emergentes como India, Pakistán, Brasil, Vietnam y Egipto.
La IA también está abaratando el coste de impartir clases sobre IA y otros temas en idiomas distintos del inglés. Hace dos años, a Coursera le costaba 10.000 dólares traducir un curso a otro idioma. Ahora, con la IA generativa, la empresa puede hacerlo por 20 dólares, asegura Maggioncalda.
El enorme abaratamiento de los costes ha permitido a Coursera traducir 4.500 cursos a 22 idiomas, cuenta.
"Ahora todo el mundo puede aprender estas cosas porque el idioma ya no es una barrera", explica Maggioncalda.
La IA puede dar la verdadera respuesta
Khatri, de Multiplier, afirma que la IA está facilitando que un mayor número de trabajadores de países con vientos demográficos favorables reciban formación para convertirse en desarrolladores de software y otras funciones con salarios elevados. Esto es útil para las empresas que operan en países con poblaciones envejecidas, como Estados Unidos, Reino Unido, Japón, España o Alemania.
Khatri también dice que la IA podría hacer que las empresas duden menos a la hora de intentar deslocalizarse al ser más sencillo que la tecnología ofrezca rápidamente una "respuesta real" a trabajadores de atención al cliente afincados en otros países. El avance de la tecnología puede ayudar a acortar las conversaciones y reducir el riesgo de que los clientes cuelguen insatisfechos.
Y es que, aunque la IA ofrezca la respuesta, "los clientes siguen queriendo hablar con un ser humano", afirma.
Daron Acemoglu, profesor de Economía del Instituto Tecnológico de Massachusetts, explica a BI que la IA podría abrir partes del mundo en las que hasta ahora las barreras lingüísticas han impedido que se conviertan en puntos clave de la deslocalización, como India o Filipinas.
"Los trabajadores de Indonesia no pueden prestar algunos servicios porque no dominan el inglés. Quizá con mejores traductores de IA puedan hacerlo", afirma.
Acemoglu también advierte de que existe el peligro de que la IA llegue a ser tan buena que reduzca la necesidad de que haya trabajadores deslocalizados.
"El camino tendría que ser bastante estrecho: que la IA sea lo bastante buena para traducir, pero no para realizar estas tareas poco cualificadas", dice Acemoglu.
"Una tendencia exponencial"
Scott Vincent, CEO de Digital Futures, una empresa británica que ayuda a personas de diversos orígenes a conseguir puestos en el sector tecnológico, explica a BI que la prueba mundial del teletrabajo que supuso la pandemia demostró a las empresas que no necesitan que todos los empleados estén juntos para seguir siendo productivos. Como resultado, dice, hay más empresas buscando ubicaciones de menor coste para acceder a esos trabajadores.
Vincent afirma haber visto "una verdadera aceleración" de las ofertas de deslocalización en todos los sectores desde la pandemia.
"Supone una amenaza significativa para el mercado laboral", teme.
La amenaza no se limita a que los trabajadores de mercados caros como el Reino Unido o Estados Unidos se vean perjudicados por alguien de un mercado en desarrollo, afirma Vincent. La deslocalización puede dificultar que las empresas produzcan talentos locales que puedan ascender dentro de una empresa.
"La IA generativa afecta, o puede sustituir, a muchas de las competencias básicas que se aprenden al principio de la carrera profesional. Así que se produce un doble golpe", explica Vincent.
Para muchas grandes empresas, la IA generativa tiene dos horizontes. Uno es el impacto inmediato en la mano de obra: el subidón de la productividad. Pero el otro efecto, más grave, es lo que él ve como una "fuga de capital humano" debido a la potencial habilidad de la IA para hacer mucho más de lo que puede hacer ahora.
"Es una tendencia exponencial por el ritmo al que avanza", afirma.
El tiempo que tardaron las tecnologías anteriores —incluidas la automatización y la robótica— en reajustar el mercado laboral fue mayor que el que estamos viendo con la IA generativa, reflexiona Vincent.
Vincent augura un aumento del gasto de las empresas en mano de obra extranjera. Digital Futures ha examinado el gasto de las 100 principales empresas que cotizan en bolsa en el Reino Unido y ha descubierto que, de media, cada una gastaba unos 750 millones de libras (unos 951 millones de dólares) al año en oficinas en el extranjero. Según Vincent, esto equivale a 1,2 millones de puestos de trabajo en el Reino Unido y a unos 16.000 millones de libras en ingresos fiscales perdidos.
Sin embargo, las ganancias a corto plazo en el extranjero pueden no generar empleo a largo plazo. Drew Cesario, consultor en operaciones de ingresos y sistemas de marketing y fundador de Botanical Grp, explica a BI que el destino de algunos trabajadores deslocalizados que podrían trabajar con la IA es probablemente similar al de los cuidadores que se sentaban en los taxis de conducción autónoma durante las fases de prueba. "Se están quedando sin trabajo", afirma.
Debido al gran número de tareas que puede asumir la IA, Cesario prevé un desplazamiento generalizado de puestos de trabajo tanto a escala nacional como internacional.
"Me encantaría decir que no la hay, pero esto no es la desmotadora de algodón", explica. "Es una tecnología general frente a una tecnología específica".
Cómo utilizar la tecnología
Vincent afirma que los Gobiernos de las economías desarrolladas y las empresas deben colaborar para hacer frente a los cambios que se avecinan en el mercado laboral. Las empresas que afirman que están deslocalizando sus actividades en parte porque no encuentran la mano de obra cualificada que requieren, necesitan que se mejoren los sistemas educativos para producir trabajadores mejor preparados, explica.
Los Gobiernos, según Vincent, podrían plantearse regular el porcentaje de la mano de obra de una empresa que puede deslocalizarse. Maggioncalda, de Coursera, explica que si se compra un coche en otro país, a menudo hay que pagar un arancel.
"Quizá si eliges pagar salarios en otro país, se podría tener que pagar también un arancel salarial", subraya. Maggioncalda cree que podría ser una forma de ayudar a igualar el coste de la mano de obra.
Mientras tanto, dice, los trabajadores deben plantearse cómo pueden "añadir valor real en un mundo en el que cada vez se automatizan más partes de su trabajo".
"Lo que hay que pensar es: '¿Cómo puedo utilizar la tecnología para automatizar ciertas partes de mi trabajo?'", afirma Maggioncalda. "Porque si no lo haces tú, alguien lo hará en otro lugar del mundo".
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