Holaluz consigue una prórroga de dos años para abonar un pagaré de siete millones de euros

Holaluz gana tiempo. La startup tecnológica de transición energética ha renovado un pagaré de siete millones de euros que vencía precisamente este viernes por dos años más, tal y como ha informado la empresa en un comunicado.

Según explican desde Holaluz, el pagaré se amortizará mediante nueve pagos y con importe creciente que no se concreta. La decisión se enmarca en el proceso de reordenación de su deuda, un plan para el que Holaluz ha contratado a la consultora PwC, una de las conocidas como big four. 

A 30 de abril, la deuda neta de Holaluz era de 57,2 millones de euros, frente a los 65,4 millones de euros al término de 2023.  Esta deuda está compuesta por el pagaré de siete millones, préstamos bancarios y otros instrumentos de financiación de circulante. La mayoría, describen desde Holaluz, están avalados por el ICO con tipos de interés favorables. 

Adicionalmente al pagaré de siete millones que se suscribió a principios de año y que acaba de renovarse, la compañía ya ha repagado este año pagarés por valor de 19,8 millones de euros. 

Holaluz ha obtenido 8,1 por otro lado millones de euros de financiación adicional entre mayo y junio de 2024, gracias a una operación de financiación por  4  millones de euros y a la venta de 800 préstamos de clientes de su negocio de instalación de placas solares por 4,1 millones de euros. 

Las cuentas aprobadas por la junta de accionistas del pasado 28 de junio muestran además una reducción de costes en 30 millones de euros respecto a principios de  2023.  

La compañía ha alcanzado un ebitda normalizado consolidado en los últimos 12 meses, hasta el 30 de abril de 2024, de 22,9 millones de euros frente a los 4,3 millones de euros de 2023, y un ebitda contable consolidado que la empresa sitúa aproximadamente en break even, es decir, en el punto financiero de equilibrio entre ingresos y gastos. Por ahora, se desconoce la cifra exacta.

Este, en todo caso, se puede comparar con el resultado negativo de 22,8  millones de euros del pasado ejercicio. Holaluz, informan desde la startup, continúa operando en línea con la previsión de ebitda normalizado para 2024 de 19 a 24 millones de euros.  

De cosechar estos resultados, la empresa remontaría un aciago 2023 en el que obtuvo pérdidas por valor de 26,6 millones de euros, cinco veces más que lo que perdió en 2022. Asimismo, el ebitda pasó de 200.000 euros negativos en 2022, a 22,8 millones de euros negativos.

Los malos resultados desataron una crisis interna en el seno de la empresa que se saldó el pasado mes de abril con la negativa de Axon y Geroa, dos de los fondos con participación mayoritaria en la startup, a firmar las cuentas de resultados.

Tras verse gravemente cuestionada, con el paso de las semanas, sin embargo, la actual directiva encabezada por la CEO de Holaluz, Carlota Pi, fue enderezando el rumbo hasta que a finales del pasado mes de junio consiguió el suficiente respaldo como para aprobar sus cuentas.

No obstante, sintiéndose perjudicada por su manera de actuar, Holaluz procedió de inmediato a apartar a los representantes de Axon y Geroa de la junta, romper el contrato de accionistas que los vinculaba, que daba a ambos fondos voz y voto en cuestiones clave como el plan de negocio o el nombramiento de directivos, y abrir contra ellos la vía judicial.

A partir de ahora, Holaluz tiene un plazo máximo de cuatro años para concretar sus acusaciones, con lo que el conflicto con Axon y Geroa, que siguen figurando como inversores mayoritarios, va para largo. Mientras, la empresa, que cotiza en BME, sigue trabajando en ofrecer mejores noticias financieras o, como poco, seguir cogiendo aire.

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Etiquetas: Energía