Los astronautas descubren grietas en un módulo ruso de la Estación Espacial Internacional que amenazan con extenderse
- Los astronautas han descubierto grietas en un módulo de la estación espacial rusa, según confirmado un funcionario a los medios estatales.
- Las grietas podrían extenderse, según el director de vuelo de la estación espacial de Rusia y Reuters, y forman parte de una serie de problemas que han plagado partes rusas de la Estación Espacial Internacional (EEI).
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Los cosmonautas rusos han descubierto grietas en un módulo en su lado de la Estación Espacial Internacional (EEI).
"Se han encontrado fisuras superficiales en algunos lugares del módulo Zarya", ha confirmado Vladimir Solovyov, director de vuelo del segmento ruso de la EEI, a la agencia de noticias estatal RIAel lunes, según un informe de Reuters que tradujo su declaración.
"Esto es malo y sugiere que las fisuras comenzarán a extenderse con el tiempo".
No está claro la extensión de las nuevas grietas o la causa. Solovyov no ha explicado si las grietas estaban causando fugas de aire, tal y como ha informado Reuters.
Business Insider no ha podido confirmar de forma independiente el informe de Reuters, y la NASA no ha respondido de inmediato a una solicitud de comentarios.
El módulo Zarya de 12,5 metros de largo fue la primera pieza de la EEI y se puso en órbita en 1998. Se utiliza principalmente para almacenamiento y propulsión.
Este es el último de una serie de problemas con los módulos rusos, ya que el lado ruso de la EEI alberga algunos de sus componentes más antiguos.
El año pasado, un inodoro en el segmento se quebró, las temperaturas aumentaron misteriosamente y un sistema de suministro de oxígeno se rompió.
"Ya hay una serie de elementos que han sido seriamente dañados y están fuera de servicio. Muchos de ellos no son reemplazables", avisó Solovyov a la Academia de Ciencias de Rusia. "Después de 2025, predecimos una falla similar a una avalancha de numerosos elementos a bordo de la EEI".
En septiembre de 2019, otro módulo de la EEI, Zvezda, que proporciona alojamiento para los cosmonautas, comenzó a perder aire. La fuga no fue importante y no representó un peligro para la tripulación, por lo que los gerentes la dejaron en paz hasta que notaron una tasa creciente de fuga.
Cuando los astronautas y cosmonautas de la estación finalmente descubrieron la fuente en septiembre de 2020, lo hicieron dejando que las hojas de té flotaran y luego siguiéndolas. Remendaron el pequeño agujero con cinta Kapton.
NASA
En 2018, se descubrió un misterioso agujero perforado en una nave espacial rusa Soyuz que estaba acoplada a la EEI. Los cosmonautas lo llenaron con epoxi antes de que pudiera despresurizar la estación.
A principios de este mes, un funcionario ruso anónimo culpó a la astronauta de la NASA Serena Auñón-Chancellor por los agujeros, alegando que los había perforado en un intento de hacer un viaje temprano a casa. El liderazgo de la NASA negó firmemente las acusaciones.
Incluso el módulo más nuevo de Rusia, una nave espacial llamada Nauka, que lanzó a la EEI en julio, ha experimentado problemas graves. Poco después de atracar en la estación, Nauka comenzó a disparar inesperadamente sus propulsores. Esto hizo que toda la EEI girara alrededor de 540 grados y se volcara antes de que los controladores de vuelo recuperaran el control una hora después.
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