Europa acaba su investigación sobre los coches eléctricos chinos y confirma los aranceles

Planta de BYD

REUTERS/Chalinee Thirasupa

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  • Europa ha confirmado los aranceles anunciados hace unas semanas para las importaciones de coches chinos. Sin embargo, los ha rebajado hasta el 37,6%.
  • Aunque Bruselas y China aún se encuentran en conversaciones, si no se pacta una solución antes de noviembre, los impuestos aduaneros se mantendrán en vigor durante un periodo de cinco años.

La Unión Europea acaba de confirmar la información que ya anunció hace un mes. Esto no es otra cosa que los aranceles adicionales que aplicará Bruselas a los coches chinos que lleguen al continente. Hasta la fecha, la UE se encontraba investigando a los fabricantes asiáticos por posible dumping.

Según ha publicado el organismo en el Diario Oficial de la UE el resultado preliminar de la investigación y ha confirmado los aranceles provisionales, que entrarán en vigor mañana

Aunque en un primer momento fijo estos aranceles en el 38,1%, ahora Europa ha bajado este máximo hasta el 37,6% de su valor para compensar las “ventajas injustas” de las que se benefician en el país asiático a lo largo de toda su cadena de valor.

Esta rebaja se debe a que, las compañías han presentado alegaciones, dando como resultado que Bruselas haya decidido aligerar el nivel de aranceles que deberán pagar, en función tanto de los hechos descubiertos como de su nivel de cooperación con las pesquisas comunitarias.

De esta manera, el grupo BYD, de propiedad privada, deberá a abonar un 17,4%; Geely, un 19,9% y, finalmente, SAIC, perteneciente al grupo MC, de propiedad pública, deberá afrontar el arancel más alto, del 37,6%. Estas cantidades se sumarán a los aranceles aduaneros regulares del 10% que se aplican a las importaciones chinas.

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El resto de fabricantes que no han sido individualmente investigados, pero han cooperado con las autoridades comunitarias facilitando información, entre ellos Tesla o BMW, tendrán que abonar un arancel del 20,8%. Aquellas empresas que han optado por no cooperar pagarán el arancel máximo previsto, de un 37,6%. 

Por su parte, como ya avanzó en junio, las investigaciones de la Unión Europa han dado como conclusiones que los fabricantes chinos reciben “subvenciones injustas” que “amenazan” con provocar un “daño económico” a los productores europeos, por lo que ha decidido imponer provisionalmente un aumento de los impuestos aduaneros a estos productos para proteger a la industria europea.

"Nuestra investigación ha concluido que los vehículos con baterías eléctricas producidos en China se benefician de un sistema de subvenciones injustas que amenaza con provocar un daño económico a los fabricantes de coches de la UE. Seguimos negociando intensamente con China para llegar a una solución mutuamente aceptable", ha advertido el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, en un comunicado. 

"Sea cual sea el resultado negociado de esta investigación, debe responder clara y plenamente a las preocupaciones de la UE y respetar las reglas de la Organización Mundial de Comercio", ha añadido.

Sin embargo, las negociaciones con China continúan con el objetivo de alcanzar “una solución aceptable” para las dos partes. A este respecto, Bruselas afirman que se han dado algunos pasos en las últimas semanas.

Pero, si no se pacta una solución antes de noviembre, los impuestos aduaneros se mantendrán en vigor durante un periodo de cinco años, explica el ejecutivo comunitario en un comunicado publicado en paralelo a la aparición en el Diario Oficial de la UE de la decisión. 

 

Los Estados miembros se pronunciarán sobre la medida dentro de unas semanas en una votación orientativa, no vinculante, que dará una idea clara de la posición del Consejo, la institución donde están representados los Gobiernos de los Veintisiete. 

Mientras que Francia, Italia y España apoyan esta medida otros países como Alemania siempre se han mostrado totalmente en contra.

De acabar aprobándose, las compañías europeas que producen en China mediante joint ventures con empresas del país asiático podrán pedir que se revise sus respectivos casos para determinar qué nivel de impuestos aduaneros deben abonar, han explicado fuentes comunitarias. 

De momento, tal y como publica La Vanguardia, hasta que se llegue a una conclusión definitiva, los derechos de aduanas a los que desde mañana están sujetas las importaciones de coches chinos a Europa se abonarán no en metálico sino en forma de unas garantías bancarias que solo se recaudarán “bajo ciertas circunstancias” en caso de adoptarlos de forma definitiva, está por ver si con carácter retroactivo.

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Etiquetas: Unión Europea, China, Coches