El Corte Inglés 3.0 ya está aquí: vende más con menos presencia comercial y aspira a volver a ser el mayor empleador del país (o no)
El Corte Inglés
- El Corte Inglés asume una nueva era. Lo hace vendiendo más pero con menos implantación comercial: hasta 100 puntos de venta menos y sin pistas del canal online.
- El gigante de la distribución, que ya dibuja su nuevo plan estratégico, también mejora su rol de empleador, con más de 700 nuevos empleados.
No son pocas las pistas que revelan que El Corte Inglés (ECI) está ante su mejor versión en años, una más robusta y con la hoja de ruta más definida.
La acertada aproximación a la generación Z parece haber sido la receta clave para encarar una nueva era económica que se evidenció hace un mes con la publicación sus cuentas anuales correspondientes a 2023, en lo que ya supone su mejor ejercicio desde 2009, gracias a una fortaleza inédita de sus divisiones de moda y viajes.
Hace unos días la empresa celebraba su junta de accionistas. De ella nacía, aún sin detalles, la aprobación del plan estratégico 2025-2030 y se producía también el nombramiento de un nuevo consejero delegado: Gastón Bottazzini, un visionario en el sector del retail.
Ahora, la publicación de su informe no financiero revela más de una pista de cómo el gigante patrio de los centros comerciales asume su versión 3.0, no sin antes haberse perdido más de una vez por el camino.
De María Pombo al Mad Cool: la receta de la 'new' era económica de El Corte Inglés
Más ventas con menos presencia comercial
El volumen global de ingresos del grupo se ha elevado un 5,4% hasta los 16.333 millones de euros. Un valor acompañado de una ganancia de 359 millones de euros, un crecimiento del 73,7% y el mayor beneficio recurrente desde hace 15 años.
Como es habitual, el motor del grupo es el retail —es decir, toda división de negocio salvo su compañía de viajes y su energética—, que supone el 79% del total del negocio. Su facturación se elevó a los 12.845 millones de euros, lo que implica un avance anual del 3,8%. "El crecimiento se ha hecho especialmente visible en moda y belleza, convirtiéndose en un generador de tendencias", explica el grupo, que no detalla cuánto aporta cada división.
A pesar de que esta pieza del negocio se encuentra en el mejor valor de los últimos tres años, aún queda camino para alcanzar su momento más álgido, el de 2019, cuando el retail del grupo superó la barrera de los 13.000 millones y supuso el 86% del total del negocio.
En cualquier caso, el avance de la división es un hecho, y lo es aun sin venir acompañada de una evolución de su presencia comercial. En términos generales, el grupo cuenta en España con 100 puntos menos de venta, y el mayor impacto —83 puntos— lo asume precisamente la división de Retail. Destaca el cierre de algún centro comercial y outlets.
La empresa sí detalla que todos sus establecimientos recibieron el pasado año 552 millones de visitas, una cifra prácticamente idéntica a la de un año atrás –551,6 millones en 2022–.
Un discreto avance en el canal físico que hace sospechar que la recuperación comercial viene vinculada a la marcha del canal online del que, sin embargo, no hay pistas desde 2021, cuando generó 1.538 millones de euros.
En los últimos números disponibles —relativos a 2023— la empresa se limita a hablar de "sólido posicionamiento de su e-commerce". Lo hace sin más base que los 900 millones de visitas que acumula su web y app y los 17 millones de pedidos despachados, un 8,5% más que en 2022.
Blindando su otro gran activo: el empleo
La mejor y más valiosa herramienta de El Corte Inglés sigue siendo su mastodóntica plantilla, que el propio grupo tilda de su "mayor activo".
No obstante, el que fuera el mayor empleador del país ha protagonizado su particular camino por el desierto tras haber estado "atrapado" en una continua reestructuración de su plantilla con un descenso del 10% en su fuerza laboral en España entre 2019 y 2020.
Destaca la venta de su división informática —con más de 2.000 empleados— en 2019 o el plan de bajas voluntarias de 2016, al que se acogieron más de 1.300 empleados mayores de 58 años. Hasta llegar, en 2021, a un inédito ERE en sus más de 100 años de vida que se saldó con la salida de 3.000 personas.
De tal manera que si se amplía la imagen laboral de la compañía, el grupo ha perdido en España —su principal mercado— más de 16.400 puestos de trabajo en tan solo 10 años.
Los últimos números disponibles invitan a pensar en una nueva etapa: al cierre de su ejercicio 2023, la plantilla nacional del grupo se movía en poco más de 76.000 personas, son 716 trabajadores más que un año atrás.
La pregunta reside ahora en saber cómo de escarpado se presenta el terreno para que el gigante del comercio recupere su valor más alto de empleabilidad —las más de 82.500 personas que empleaba en 2019–, pero también pone de manifiesto otra cuestión: si son cruciales para que la empresa recupere su rumbo definitivo.
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