Disney apuesta por uno de los campos más fértiles para el entretenimiento del futuro: el metaverso
Disney
- Con el tiempo de ocio y entretenimiento repartido en infinidad de disciplinas, ser relevante es cada vez más difícil centrándose en una única cosa, en la experiencia puntual, en el consumo por producto.
- Para Disney la mentalidad del metaverso encaja a la perfección: el fan ya no tendrá que entrar y salir del universo Disney, sino que tendrá a su alcance un mundo virtual que le ofrezca todo lo que pueda desear.
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Disney quiere su pedazo de metaverso, esa nueva generación de internet que proporcionará una experiencia inmersiva y multisensorial donde el individuo podrá interactuar y relacionarse mediante avatares en tres dimensiones.
El metaverso lleva años desarrollándose, aunque se ha puesto especialmente de moda en las últimas semanas, después de que Mark Zuckerberg anunciase que el futuro de la compañía se asentará en este nuevo ecosistema virtual. No es el único. Epic Games, Roblox y hasta Microsoft trabajan en sus propios metaversos. El de Disney es, sencillamente, otro más.
La apuesta por el metaverso articuló gran parte del discurso del CEO de Disney, Bob Chapek, durante la presentación de los resultados correspondientes al tercer trimestre del año. El metaverso de Disney, en palabras de Chapek, será el colofón para una compañía que domina la experiencia física y que ha hecho sus pinitos en el uso de las tecnologías digitales.
Ahora, con un Disney+ en plena expansión y un consumidor al que la pandemia ha empujado con firmeza al entretenimiento en streaming, parece el momento de ir un paso más allá. «Nuestros esfuerzos hasta la fecha han sido la antesala de una era en la que seremos capaces de conectar el mundo físico y el digital de una manera mucho más cercana, permitiendo un storytelling sin límites, en un metaverso Disney propio».
El metaverso, un filón para el entretenimiento
Que Netflix haya incorporado a su oferta videojuegos o que compañías de videojuegos como Riot Games estén desarrollando series de televisión ya no es algo puramente anecdótico.
Las compañías de entretenimiento están mostrándose muy receptivas al desarrollo de proyectos que abarcan diferentes géneros, formatos y lenguajes. ¿El motivo? La necesidad de mantener la relevancia, que en el momento actual ya no puede sustentarse en el dominio de una única parcela.
Con el tiempo de ocio y entretenimiento repartido en infinidad de disciplinas, ser relevante es cada vez más difícil centrándose en una única cosa, en la experiencia puntual, en el consumo por producto. Es necesario establecer una relación lo más estrecha y continuada posible.
Como explicaba Andrew Webster en The Verge «en una década, el entretenimiento intentará serlo todo». A esto aspira el metaverso: a ofrecer una experiencia amplia que lo abarque todo mediante un flujo constante de productos transversales.
Para Disney, que lleva décadas explotando todos los puntos de contacto posibles de sus propiedades intelectuales con el fan (merchandising, series, parques temáticos, cómics, videojuegos…), la mentalidad del metaverso encaja a la perfección: el fan ya no tendrá que entrar y salir del universo Disney, sino que tendrá a su alcance un mundo virtual que le ofrezca todo lo que pueda desear.
Las posibilidades de este contacto continuo, frente a la experiencia aislada, son extraordinarias. Los distintos productos podrán retroalimentarse entre ellos, alumbrando una nueva (y muy lucrativa) etapa: el de las franquicias multimedia.
Uno de los principales activos que el metaverso sirve en bandeja es la posibilidad de enriquecer la experiencia mediante un storytelling inmersivo e interactivo. ¿Y si después de haber visto en el cine Eternals pudieses entrar en la Domo desde casa y explorar sus rincones como un eterno más? Esta es tan solo una de las miles de posibilidades que Disney tendrá para convertir a sus espectadores en parte activa de la narrativa, lo que elevará su experiencia desde el punto de vista emocional.
La construcción de mundos virtuales también brinda una oportunidad excelente para integrar a la audiencia en experiencias superando las barreras geográficas. Las premieres o la inmersión que ofrece un parque temático se podrán normalizar sin necesidad de moverse de casa. Y otro tanto cabe decir de las posibilidades que ofrece el contenido generado por el usuario a la hora de desarrollar narrativas a partir de una propiedad intelectual con la que se sientan conectados.
Para Disney el desarrollo de este espacio virtual, continuo y persistente, que ofrezca a los usuarios la posibilidad de explorar y relacionarse es, en realidad, una cuestión de necesidad. Como explica Richard Yao, es necesario que las compañías de entretenimiento con plataformas de streaming busquen nuevas vías de negocio para cubrir la brecha económica que genera el modelo bajo demanda, bastante menos rentable que el modelo de televisión de pago tradicional.
Entender la importancia que estas nuevas experiencias virtuales están teniendo a la hora de generar una experiencia de consumo satisfactoria es el primer paso para empezar a construir el nuevo mundo. «Si los parques temáticos fueron la solución del siglo XX al storytelling inmersivo, el metaverso será la respuesta del siglo XXI».
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Etiquetas: Metaverso, Trending, Disney Plus, Internet, Streaming