Los beneficios de Tesla caen un 45% y despierta el nerviosismo de los inversores

Tal y como se esperaba, los resultados del segundo trimestre de Tesla han sido una auténtica catástrofe. Después de un inicio de año bastante complicado, donde ha sumado dos trimestres de caídas, todo apuntaba a que los resultados de entre abril y junio no iban a ser mejores.

En el segundo trimestre, Tesla ha registrado un beneficio neto de 1.478 millones de dólares, lo que representa una caída del 45% en relación con el mismo periodo del año pasado. Su margen de ganancias ajustado también cayó del 18,7% al 14,4% interanual, ya que la compañía ejecutó recortes de precios en un intento de impulsar las ventas en medio de un entorno de demanda desafiante.

Esto se traduce en un beneficio por acción de 0,42 dólares, lejos de los 0,78 dólares por título del segundo trimestre de 2023. Además, el BPA ajustado ha sido de 0,52 dólares, por debajo de las previsiones de consenso, que anticipaban ganancias de 0,62 dólares por acción.

Sin embargo, la compañía sí ha cumplido con las expectativas del mercado con su cifra de negocios, que ha crecido un 2% desde el mismo periodo de 2023, para alcanzar los 25.500 millones, mientras que el consenso de analistas esperaba 24.770 millones de dólares.

El futuro de Tesla depende de los creyentes de Elon Musk

Los ingresos procedentes del negocio de automóviles han caído un 7% desde el segundo trimestre del año pasado, hasta los 19.878 millones, mientras que la facturación del segmento de energía se ha duplicado y ha aportado 3.014 millones al total. Los 2.608 millones restantes corresponden a "servicios y otros ingresos", una partida que ha deparado una mejora interanual del 21%.

"En el segundo trimestre, logramos ingresos trimestrales récord a pesar de un entorno operativo difícil. El negocio de almacenamiento de energía continúa creciendo rápidamente, estableciendo un récord en el segundo trimestre con 9,4 GWh de implementaciones, lo que resulta en ingresos récord y ganancias brutas para el segmento en general", detalla la firma.

Después de los resultados, las acciones de Tesla han caído un 8%. Normal, teniendo en cuenta que Elon Musk, CEO de Tesla, no ha conseguido calmar a los inversores en la llamada de resultados posterior a la publicación de la nota de prensa.

La verdad es que Musk tenía poco que tranquilizar a los inversores, y aquellos ansiosos por escuchar detalles sobre los próximos vehículos de Tesla probablemente se sintieron decepcionados.

Entre otras cosas, Musk ha tenido que enfrentarse a preguntas sobre la envejecida línea de modelos del fabricante de automóviles, el retraso de su evento Robotaxi y las preocupaciones sobre el suministro de chips de inteligencia artificial del fabricante de automóviles.

El CEO de Tesla confirmó que el evento Robotaxi de Tesla se había retrasado hasta el 10 de octubre, pero no tenía mucho que decir sobre cuándo podrían esperarse los primeros viajes en Robotaxi en el servicio autónomo.

La aprobación regulatoria para el Robotaxi y su tecnología de conducción autónoma sin supervisión también será un obstáculo clave que Tesla deberá superar. Aunque Musk se mostró optimista sobre el hecho de recibir la luz verde a la regulación para poder hacer un viaje este año, no pudo dar un cronograma claro.

Musk argumentó que los reguladores tendrían una "obligación moral" de aprobar la tecnología autónoma de Tesla cuando se les mostraran los datos de conducción.

Por otro lado, Musk no dio respuestas muy concretas al ser preguntado por el ansiado vehículo barato de Tesla y por el Roadster actualizado. El CEO afirmó la compañía presentaría su vehículo eléctrico más económico en la primera mitad de 2025, pero no dio más detalles sobre el producto, que Tesla ha estado prometiendo durante años.

Los accionistas también quisieron saber sobre la noticia, donde se afirmaba que había desviado chips de Nvidia que iban destinados a Tesla a sus empresas X (antes Twitter) y xAI. Musk intentó presentar la medida como algo realmente beneficioso para Tesla, ya que el fabricante de automóviles carecía en ese momento de la infraestructura para utilizar los chips.

Sin embargo, esta justificación no le sirvió de nada, ya que minutos antes había mostrado preocupación por el acceso del fabricante de automóviles a los chips de inteligencia artificial de Nvidia a la luz de la gran demanda de ellos en medio de la carrera armamentista de la inteligencia artificial, y agregó que Tesla apunta a complementar eventualmente los chips con su supercomputadora Dojo, que todavía está en proceso de construcción.

Conoce cómo trabajamos en BusinessInsider.

Etiquetas: Trending, Mobility Insider, Coche eléctrico, Tesla, Elon Musk