La pensión de 500 euros que pueden solicitar las amas de casa al jubilarse
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- En 2024, las personas mayores que hayan sido amas de casa durante su vida laboral pueden recibir una pensión de algo más de 500 euros.
- Sin embargo, para poder solicitar la ayuda deben cumplir una serie de requisitos relacionados con el nivel de ingresos de la propia persona y sus familiares cercanos.
Las amas de casa en España, históricamente invisibilizadas y sin acceso a derechos laborales como la jubilación, pueden recibir en 2024 una pensión no contributiva de algo más de 500 euros. Aunque su trabajo es esencial para el cuidado del hogar y la familia, su labor no ha sido tradicionalmente reconocida en términos de seguridad social, dejándolas desprotegidas al alcanzar la edad de jubilación.
El trabajo de las amas de casa es extenuante y multifacético. Además de las tareas domésticas diarias, estas mujeres —en su mayoría— se encargan del cuidado de los hijos, así como de los familiares mayores, en un rol que requiere una dedicación completa. Pero si cumplen una serie de requisitos de bajos ingresos, pueden acceder a una pensión.
Requisitos para la pensión del Imserso
Para paliar esta situación, el Imserso ofrece una pensión no contributiva destinada a estas personas. Para acceder a la ayuda, es necesario tener 65 años o más, residir en España y haberlo hecho durante al menos 10 años, de los cuales dos deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud. Además, las amas de casa deben demostrar que carecen de ingresos suficientes, con un umbral máximo de 7.250,60 euros anuales en 2024.
La cuantía de la pensión puede alcanzar los 517,90 euros mensuales (más dos pagas extra en junio y en noviembre), lo que equivale a 7.250,60 euros anuales. No obstante, este ingreso es incompatible con otras pensiones, como las de invalidez o las asistenciales, y está sujeto a estrictos criterios económicos que varían en función del número de personas en el hogar y sus ingresos conjuntos.
Para las amas de casa que conviven con familiares, los requisitos de ingresos son más estrictos. Por ejemplo, si viven con su pareja o con familiares de segundo grado, el ingreso familiar no debe superar los 12.326,02 euros anuales para dos personas, y aumenta progresivamente según el número de miembros del hogar.
Un paso adelante, pero insuficiente
Aunque esta pensión no contributiva es un avance importante, sigue siendo insuficiente para garantizar una jubilación digna para las amas de casa que no reciben la ayuda de familiares o que no cuentan con un patrimonio. La cantidad máxima que pueden recibir apenas cubre las necesidades básicas, lo que refleja una deuda histórica con un colectivo que ha sostenido la estructura familiar en España durante décadas.
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Etiquetas: Pensiones