Los 9 mejores juegos de cartas españolas para disfrutar de una tarde de diversión en compañía o soledad
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- Aquí te vas a encontrar con los 9 mejores juegos de cartas españolas.
- Desde clásicos como el mus o la escoba, hasta juegos como la escoba o el solitario, por si quieres disfrutar de la diversión en soledad.
Si hay algo que no pasa nunca de moda, son los juegos de cartas.
Con una simple baraja y unos cuantos amigos o incluso solo, puedes pasar una tarde francamente divertida donde las risas y la diversión están a la orden del día.
En esta ocasión, te voy a dejar con los 9 mejores juegos de cartas españolas con los que seguro que lo pasas en grande.
Desde clásicos como el mus o el burro, hasta algunos menos conocidos como la pocha o juegos para jugar en solitario si prefieres disfrutar en soledad.
La pocha
Este es, sin lugar a dudas, uno de los mejores juegos de cartas españolas que existe por su enorme diversión, aleatoriedad y que nunca está claro quién va a ganar la partida hasta la ronda final.
¿Su gran punto fuerte? No se trata de obtener más o menos bazas, sino más bien acertar de antemano cuántas te vas a llevar en función de las cartas que tienes.
Es un juego ideal para 4 o 5 jugadores y su mecánica es muy sencilla: tienes que averiguar cuántas manos te vas a llevar tiendo en cuenta los palos que tienes y su valor, así como que hay un palo que "pinta" y gana al resto, sea cual sea la carta.
El valor de las cartas va del As como la mejor carta hasta el 2 como la de menor valor, pero la gracia es que si pintan bastos, por ejemplo, y sacas un As de oros, pero tu rival saca un 2 de bastos, se lleva esa mano.
Además, es un juego en donde se reparte primero una sola carta a cada jugador y, a medida que avanza la partida, se van repartiendo más cartas hasta la totalidad de la baraja y luego a la inversa.
El mentiroso
Otro de los juegos de cartas españolas más divertidos y que, además, es perfecto para toda la familia.
El funcionamiento es muy simple: se reparten todas las cartas entre los 2 a 5 jugadores que pueden participar y luego, en orden, una persona dice una combinación de cartas en voz alta, todas del mismo número, y las coloca boca abajo en la mesa.
El siguiente jugador tiene a su disposición 2 opciones: creer al primero y seguir con otra combinación de cartas similar —si se han jugado 2 reyes, este tiene que lanzar un rey extra o más— o bien pensar que es mentira y darle la vuelta a las cartas.
Si es mentira, el jugador que ha mentido debe llevarse todas las cartas del monto, pero si es verdad, el que ha destapado la jugada, debe ser el que se quede con las cartas.
¿El objetivo final? Ser el primer jugador en quedarse sin cartas en su mano.
El tute
Es un juego muy similar a la pocha, ya que se tiene en cuenta que hay un palo que "pinta" y se deben jugar cartas que superen la que está en la mesa del mismo palo, pero su gran diferencia radica en que se juega en parejas y hay que "cantar" las cartas.
Los puntos se reparten de la siguiente manera: ases, 11 puntos; treses, 10 puntos; reyes, 4 puntos; caballos, 3 puntos; y sotas, 2 puntos.
El punto más interesante son los cantos: si, por ejemplo, tienes el caballo y el rey del mismo palo, puedes cantar 20 o bien 40 si la combinación corresponde con la carta que pinta.
La escoba
Un absoluto clásico de los juegos de cartas españolas que es francamente sencillo de aprender y muy divertido de jugar.
A la escoba pueden jugar de 2, 3, 4 o 6 jugadores, formando en estos 2 últimos casos bandos contrarios, y el objetivo es hacerse con el mayor número posible de puntos capturando cartas haciendo combinaciones que sumen 15.
El elemento clave es que, si alguien captura todas las cartas de la mesa, se crea una escoba que otorga puntos extra de cara al final de la partida.
Generalmente, se juega a 21 o 31 puntos y hay una serie de combinaciones que otorgan puntos cuando se termina una mano.
- Por cada Escoba: 1 punto
- Por tener todos los oros: 2 puntos
- Por tener mayoría de oros: 1 punto
- Por tener el «guindis» (siete de oros): 1 punto
- Por tener los 4 sietes (incluido el valor del guindis): 3 puntos
- Por tener mayoría de sietes: 1 punto
- Por tener mayoría de cartas: 1 punto
- Si el contrario tiene menos de 10 cartas: 2 puntos
El burro
Otro de los clásicos y perfecto para jugar con los más pequeños de la casa porque es muy sencillo de aprender y francamente divertido.
Primero se separan 4 cartas del mismo número y luego se baraja y reparten todas las restantes entre los jugadores. ¿El objetivo? Conseguir 4 iguales para ganar la partida.
El funcionamiento es muy simple: a la de 3, todos los jugadores descartan una carta que deben pasar al jugador de su derecha. Cuando alguien consigue reunir las 4 iguales, grita "¡Burro!", y pone su mano en el centro de la mesa.
Rápidamente, el resto de jugadores debe poner la mano encima de la del ganador. El último en ponerla pierde y se lleva una letra de Burro. Cuando alguien completa la palabra, es eliminado de la partida y el resto sigue jugando hasta que solo queda uno.
El mus
No solo uno de los más conocidos, sino uno de los mejores juegos de cartas españolas que existe.
Es un juego ideal para 4 jugadores que compiten en parejas para conseguir la mejor puntuación posible.
En cada baza, se juegan 4 jugadas, que son la grande, gana el que tiene la mano formada por las 4 cartas más altas; la chica, la que tenga la mano más baja; pares, el que tenga más cartas iguales y juego, que es el que más se acerca a 31 sumando el valor de sus cartas.
La brisca
Es un juego muy similar al tute, puesto que el desarrollo es similar y los puntos de las cartas también, pero en vez de 3 cartas se reparten 10.
Después de sacar el palo que manda, cada jugador va sacando cartas y gana el que más bazas se lleva. Al final de la ronda, se suman los puntos y gana el jugador o la pareja que más tenga.
El solitario
Si quieres disfrutar en soledad, este es el mejor juego de cartas españolas que puedes jugar.
Lo que tienes que hacer es organizar las cartas en 7 columnas que van aumentando las cartas tapadas de izquierda a derecha.
El objetivo es ir haciendo escaleras para liberar espacio y así levantar cartas tapadas y luego ir consiguiendo liberar los palos del as al rey que debes ir colocando en orden en la zona superior.
El chinchón
Y, por último, toca hablar del chinchón, un juego francamente fácil que tiene la peculiaridad de que necesitas 2 barajas para jugar.
Su funcionamiento es simple: se reparten 7 cartas a cada jugador y se coloca una carta boca arriba en el centro de la mesa. El resto se sitúa al lado de esa carta para así poder robar cuando lo necesites.
¿El objetivo? Hacer combinaciones de 3 o 4 cartas para conseguir algo de valor idéntico o formar una escalera. Por ejemplo, puedes hacer 1, 2, 3 del mismo palo y 4 reyes.
¿Su punto fuerte? Si consigues una escalera del mismo palo con las 7 cartas, ganas automáticamente la partida.
Al final gana la persona que más puntos tenga cuando se terminan las cartas para robar.
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